¿Preocupado por tu Azúcar?

 In Alimentos, Nutrición

glicemial

El azúcar es para el ser humano el principal combustible. El aporte de azúcar al organismo es vital, pero cuando la glicemia es muy elevada el aporte de azúcar es tóxico porque deshidrata las células hasta matarlas.

SI TE ESTAS HUNDIENDO, ¡DEVUÉLVETE AHORA!

1.¿SOBREPESO?: el primer indicador de que estar perdiendo el control de tu glicemia es un aumento de tu circunferencia abdominal superior a 80cm para las mujeres y superior a 90 cm en los hombres. La circunferencia abdominal se mide 15 0 20 cm arriba de las caderas.

2.¿TRIGLICÉRIDOS? cuando la condición sigue declinando se elevan los triglicéridos por encima de 150mg/dl. Antes de perder la capacidad de “quemar” la glucosa el organismo empieza a perder la capacidad de quemar las grasas. Cuando esto pasa se elevan los triglicéridos en la sangre y sabes que estás perdiendo el control de tu glicemia.

3.¿GLICEMIA? Cuando tu glicemia está baja o elevada es porque llevas un tiempo hundiéndote y ya perdiste el control sobre ella. Donde sea que te encuentres en esta espiral descendente, es hora de devolverte.

Para controlar la glicemia:

Tiene que existir un equilibrio entre la cantidad de glucosa que entra a la sangre y la cantidad que sale. La que entra viene de la alimentación y las reservas. La glucosa que sale de la sangre entra en las células para ser consumida o almacenada. El “celador” que decide si la glucosa puede entrar en la célula se llama receptor insulínico. A este se le pega la hormona producida por el páncreas llamada insulina, con el fin de hacer pasar la glucosa adentro de la célula.

El páncreas utiliza aminoácidos (nutrientes extraídos de las proteínas consumidas), manganeso, biotina y zinc para producir insulina y secretarla en la sangre cuando detecta una elevación de la glicemia. El propósito de la insulina es bajar la glicemia haciendo bajar la glicemia haciendo entrar la glucosa en las células.

El receptor insulínico reconoce la insulina y deja entrar el azúcar en la célula con más facilidad cuando esta necesita “gasolina” (es decir cuando haces actividad física) y en presencia de ciertos nutrientes: cromo, manganeso, vanadio biotina, vitamina D y algunas sustancias provenientes de plantas como la canela. Cuando más sensible es el receptor insulinico a la presencia de la insulina, más fácilmente se abre la puerta para dejar entrar el azúcar en la célula.

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