Pepino: Limpia y Embellece la Piel

Comer un pepino es como beberse un vaso de agua. Teniendo en cuenta que el 96% de su peso es agua, un pepino de 250g contiene 240 g de agua. Pero ¡atención! Eso no significa que carezca de valor nutritivo. Los 10 gramos de materia sólida que se hallan en un pepino de 250g tienen gran valor biológico y poder curativo.

El pepino es una de las hortalizas que menos calorías proporciona, debido a su elevado contenido en agua. El pepino se consume todavía inmaduro, pues cuando se madura pierde la tersura y se hace esponjoso.

La forma ideal de consumir el pepino es cruda, debe masticarse muy bien para que no resulte indigesto. El pepino debería comerse completamente natural, solamente bien lavado y sin cascara.

El pepino es muy utilizado en la medicina, por sus cualidades emolientes, calmantes, refrescante y sobre todo alcalinízate. Gracias a su enorme contenido de agua, refresca la sangre y tiene un efecto purificador sobre los intestinos. Son muy recomendables también, cuando hay una tendencia a la necrosis, y en todos aquellos  casos en que es necesario neutralizar la excesiva acidez, como en la diabetes, gota, obesidad, artritis, etc. El zumo es bueno para las inflamaciones del tubo digestivo y de la vejiga.